Origen del Escudo Dominicano


El escudo de la República Dominicana fue creado en la época de la proclamación de independencia nacional. El mismo ha experimentado un largo proceso de modificaciones sucesivas. La historia registra 21 escudos incluyendo el actual. Los primeros tienen elementos comunes con el escudo haitiano.

El primer escudo de armas tenía dos ramas exteriores de laurel y debajo de éstas, formando un arco, aparecía una serpiente mordiendo y tragando su cola (signo de eterna evolución). En un tercer plano aparecía, abierto y en el centro, el libro de los Evangelios; detrás del libro había un trofeo de armas (una lanza y un fusil con bayoneta calada a la derecha, y un sable y una corneta a la izquierda); arriba del libro había una bandera dominicana. En segundo plano habían dos banderas dominicanas y, en el cruce de las astas, había un gorro frigio (símbolo de la libertad). En primer plano, en la parte inferior, había una cinta ancha con las palabras "República Dominicana" y, a ambos lados en la parte inferior, dos cañones con sus respectivas balas esféricas en forma piramidal.
Aunque esta variedad de escudos fue apareciendo en el lapso de 1844 hasta el 1913, esto no significaba que el más reciente desplazara al anterior; eran usados indistintamente tanto unos como otros en documentos oficiales y a veces se combinaban unos con otros o se omitían detalles en algunos. Cada vez que se reformaba la Constitución, se hacían pequeñas correcciones al describir el escudo.
Solamente a partir del año 1913 se oficializó una uniformidad heráldica mediante decreto del 6 de febrero de 1913 expedido por el gobierno de Monseñor Nouel, que establecía la forma actual. En el mismo decreto aparecía un diseño, hecho por Casimiro Nemesio de Moya, reproduciendo el "Gran Sello de la Nación".
Además de la forma, dicho decreto fijó, en su artículo segundo, los colores actuales: azul ultramar y rojo bermellón.